Posted by : Soy de Villa Sarmiento

Por un lado, se definen como “lo más sano que tiene el fútbol”. Pero, por otro, protagonizan situaciones que atentan contra sus propios colegas o pretenden sacar ventajas con acciones de dudosa honorabilidad.
Por Jorge Fuentes
A continuación, un decálogo de mandamientos que los players argentinos cumplen sin ponerse colorados.
Hablemos de los célebres “códigos del fútbol”. De esas leyes no escritas que, para los futbolistas, tienen un valor supremo y que hay que cumplir bajo cualquier circunstancia. Algunos de esos códigos no permiten demasiadas objeciones. Hay agradecimiento en el goleador que va a buscar al compañero que le dio el pase previo a la conversión. Hay caballerosidad cuando se devuelve un balón luego de que el equipo rival tire la pelota afuera para atender a un jugador lesionado. Hay gratitud cuando no se festeja el gol a un ex equipo en el que se ha vivido momentos felices. Y hay misericordia cuando se levanta el pie del acelerador cuando el triunfo ya está abrochado y el contrincante tiene un par de jugadores menos en la cancha. Pero, también, hay otros “códigos” que no dejan bien parados a los futbolistas. Hay unos cuantos, pero El1 solo ha seleccionado una decena de ellos. Una suerte de “Diez Mandamientos” que todo futbolista debe cumplir si quiere ser considerado como tal.

1. Pedirás amonestación / expulsión para el rival
Hay pocas imágenes más vergonzosas que la de un jugador juntando el pulgar y el índice de una de sus manos, moviéndola reiteradas veces de atrás hacia adelante, pidiéndole al árbitro que amoneste o expulse a un jugador del equipo rival. Por partido, eso ocurre, como mínimo, más de diez veces. El honor y la hombría, ausentes sin aviso.

2. Simularás una lesión como si hubieras recibido un tiro en el pecho
Con el fin de sacar ventaja, el futbolista hace cualquier cosa. De manera digna o de modo vil. Para el caso, da igual. Una de las formas más recurrentes es la de simular un dolor extremo ante un mínimo roce. O, peor, ante la existencia de roce alguno. Así, pueden generar una infracción a favor o provocar la expulsión de un rival. Luego, en el vestuario, dirán que “el fútbol es para los vivos”.

3. Te tirarás al piso simulando dolor para frenar el ataque del rival
Una especie de “hermano menor” del mandamiento anterior. La modalidad es la misma: simular para sacar ventaja. Pero, como se hace cuando el rival está en posición ofensiva, el fin es detener ese ataque con esa artimaña. Así, el oponente se ve moralmente obligado a tirar la pelota afuera para dejar que atiendan al jugador “lesionado” que, milagrosamente, regresa “sano” al campo de juego diez segundos después.

4. Devolverás la pelota a 50 metros de donde se detuvo el juego
Este mandato también está vinculado a los dos anteriores. Se trata de tener la “gentileza” de devolver el balón al equipo que tuvo la deferencia de tirar la pelota afuera para que se atienda a un jugador “lesionado”. El tema es que esa devolución se hace enviando la pelota bien lejos de dónde se estaba desarrollando la jugada. Un juego de caballeros…

5. Demorarás el juego de cualquier manera cuando estés ganando/empatando
El ingenio del futbolista se exprime al máximo para cumplir este precepto. Lo más común es hacerlo vía “lesión”, como se reflejó en los mandamientos anteriores. Pero, también, se puede hacer tirando la pelota lejos, tardando para hacer un lateral o ejecutar un tiro libre o, como suelen hacer los arqueros, yendo a buscar la pelota casi hasta el corner cuando el alcanzapelotas ya le devolvió el balón adentro del área. La viveza não tem fim...

6. Protestarás todas las jugadas, incluso, las que no merezcan discutirse
Un lateral mal sancionado o un corner que no debió ser convalidado pueden ser el inicio de la tercera guerra mundial. Al menos, eso se desprende de la manera en que los futbolistas protestan TODAS las jugadas. Las dudosas y las que no lo son.

7. Golpearás al rival que la pise o tire un caño si tu equipo va perdiendo
Si un jugador tira un caño o mete un sombrero cuando su equipo tiene el partido prácticamente ganado es considerado traidor a la patria. No importa si el futbolista juega de esa manera en cualquier circunstancia, aun, en la derrota. Entonces, hay vía libre para ajusticiarlo de la manera más ruda que se pueda. Lo peor es que esto suele ser silenciosamente permitido por el árbitro del encuentro.

8. Mandarás al frente a tus compañeros
No es algo que ocurra todos los partidos, es cierto, pero pasa con cierta frecuencia. Lo hacen los arqueros, cuando quedan pagando y empiezan a hacer gestos a los defensores culpándolos de haber marcado mal. O los delanteros, cuando un compañero termina mal una jugada y hacen ampulosos gestos para que todos vean que se equivocó en no pasarle el balón. ¿El compañerismo? Mal, gracias.

9. Festejarás goles de otros como si fueran propios
Tampoco es algo que se vea todos los fines de semana, pero, cuando pasa, provoca una vergüencita que incomoda. Generalmente, sucede cuando un atacante celebra un gol anotado por un rival en contra, pero hay casos en los que se le roba el gol a un propio compañero, como ocurrió en el 1-1 de Almirante Brown ante River, el 4 de febrero de 2012, cuando Daniel Vega no solo gritó como propio el tanto marcado por Diego Cisterna para el Mirasol, sino que, también, ¡se puso a llorar de la emoción! En fin…

10. De grande, le raparás el pelo a los juveniles en la pretemporada
Los futbolistas “experimentados” son los encargados de uno de los ritos más humillantes del fútbol argentino: rapar a los juveniles que se suman al plantel profesional en la pretemporada. Un derecho de piso, que algunos denominan “bautismo”, del que los pibes no pueden escapar. Un abuso que pocos critican y que se acepta como si fuera algo normal. Porque, claro, está dentro de los “códigos del fútbol”. Y esas cosas no se discuten...

Leave a Reply

Subscribe to Posts | Subscribe to Comments

- Copyright © CLUBES Y DEPORTES - Hatsune Miku - Powered by Blogger - Designed by Johanes Djogan -