Nos pareció una interesante reflexión la de Gustavo Fernández acerca de como comportarse siendo padre de un chico que juega Fútbol en un club de barrio
Hola
a todos
! Se acerca el final de otra temporada, pero ésta tiene algo
especial para los papás de la categoría 98... es el último año de
competencia de nuestros pichones y en mi caso es una tristeza muy grande
porque se terminan los sábados en el Social.
Pasa demasiado rápido el
tiempo, se nos escurren entre las manos ésos momentos tan lindos
vividos con ESTA CAMISETA que uno quisiera volver a vivir una y otra, y
otra, y otra vez... Por eso siento la necesidad de escribir ésto con
todo respeto y sin ánimo de confrontar con nadie.
El SOCIAL CLUB es
MUY GRANDE, pasó los 70 años de vida y está como en sus mejores
momentos. Guido empezó la escuelita con Pablo Granda en el 2002, con 4
años y un mes y a los cinco debutó en campeonato jugando para la 96, con
permiso especial por ser dos años menor. En realidad atajaba, jugaban 4
cat 97 y un sólo 96... Sandrito.
Y debutaron nada menos que con P.
Chas! 10 a cero abajo y a 5 del final...GOOOOOL DEL SOCIAL, montaña
humana de enanos!!!!! ése 1 a 10 fué uno de los goles más festejados que
ví y no voy a olvidar jamás.
Estoy seguro que Pablo recuerda aquella
mañana de domingo en Parque Chas...
Hoy veo con un poco de tristeza a
padres que deciden mover a sus hijos de un club a otro "por los malos
resultados deportivos" o "por decisión del nene". Tienen todo el derecho
del mundo a hacerlo. Lo que no tienen derecho es a criticar al club o
la gente que lo compone o trabaja dentro de él, Y LO HACE ABSOLUTAMENTE
AD HONOREM porque no están de acuerdo en algo. Háganse cargo de sus
decisiones como adultos y sean respetuosos del club que ayudó a formar a
sus hijos.
He visto chicos perder partidos, llorar y después de
media hora jugar, correr, reír y hasta cambiar figuritas con los
ocasionales rivales. Dudo mucho que los chicos quieran cambiar de club
por los malos resultados.
Y si mi hijo llora de más o sufre demasiado
por un partido perdido, ahí debemos aparecer papás y mamás para contener
y hacerlos entender que es sólo el resultado de un juego y lo
importante es jugar y dejar todo en la cancha, por los amigos. El juego
da revancha todos los sábados, y los amigos son para siempre.
EL CLUB
GENERA ESTA SITUACIÓN.
He visto puteadores de jornada completa,
amenazadores de árbitros infantiles, comités en las sombras para el
derrocamiento de técnicos/delegados/comisión que no tienen idea del daño
que les causan a sus hijos con éste comportamiento. Los averguenzan.
Si quieren a sus hijos y al club acompáñenlos si pueden, disfruten de
estos años hermosos, hagan banderas, alienten a todas las categorías y
demuéstrenle que los aman y son lo más importante más allá de cualquier
resultado. Se los digo de verdad, pasa rápido el tiempo...
Saludos y gracias por todo.
Gustavo, papá de Guido.
